Informe OTLE 2021

3.6.3 Balance y conclusiones

Los efectos de la pandemia del COVID-19 también se trasladan al nivel de endeudamiento del conjunto de las actividades productivas de la economía española. Concretamente, en 2020 el volumen de deuda del conjunto de la economía española se incrementó un +7,6 %, rompiendo la tendencia a la baja observada ininterrumpidamente durante los últimos 9 años. Este repunte en el nivel de crédito fue mayor en el sector de “transporte y almacenamiento”, cuyo incremento fue del +15,1 %, motivado, entre otros factores, por la mayor severidad de la pandemia en estas actividades.

Este incremento del nivel de endeudamiento no se ha traducido, por el momento, en una mayor morosidad, continuando con la tendencia descendente de los últimos años para el conjunto de los sectores analizados. Este fenómeno también se observa en el “transporte y almacenamiento”, que alcanzó en 2020 una tasa de morosidad del 4,0 %, inferior a la del conjunto de la economía (5,0 %), así como a la media del sector servicios (4,7 %).

Por último, es preciso resaltar que la morosidad suele llevar un cierto desfase en relación con otras variables como el volumen de crédito o la evolución de otras variables socioeconómicas o de actividad. En este sentido, mientras que el volumen de crédito del sector “transporte y almacenamiento” alcanzó su máximo en el año 2008, la morosidad registró su valor más elevado en 2014, que fue precisamente el año a partir del cual empezó a recuperarse la movilidad de una forma más global y generalizada. Por tanto, es preciso seguir observando el comportamiento de estas variables en los próximos años para poder inferir si los esfuerzos que han soportado las empresas y las medidas y ayudas de las administraciones consiguen los efectos deseados.